Anabel Medina terminó su periplo por Atenas 2004 con la derrota sufrida ante la francesa Mary Pierce, que ganó en dos sets, por 7-5 y 6-3. La española no fue obstáculo para la veterana raqueta gala, que afronta el tramo final de su carrera con la intención de hacer algo notable en el torneo olímpico.

La jugadora de veintidós años aguantó el ritmo de Mary Pierce en el primer set, el único que mantuvo cierto equilibrio en el juego, pero una vez obligada a romper el servicio de su adversaria terminó por ceder la manga. La situación desmoronó a la valenciana y facilitó la tarea de la tenista nacida en Montreal hace veintinueve años, que llegó a ser la séptima jugadora del mundo en el año 2000 y que juega en Atenas sus cuartos Juegos Olímpicos.

Pierce, ganadora de Roland Garros en el 2000 y del Abierto de Australia en 1995, se enfrentará en segunda ronda a la rusa Nadja Petrova, novena favorita, que se impuso a la eslovaca Martina Sucha por un doble 6-3.