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Visibilizar y poner en valor a todas las grandes mujeres de diferentes ámbitos del mundo deportivo han sido los principales objetivos de la II Jornada Mujer y Deporte. Doce grandes referentes se han dado cita hoy miércoles en la sede del Comité Olímpico Español en una jornada en la que se buscaba concienciar y reflexionar sobre la importancia de la mujer en el mundo del deporte.

Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español, ha sido el encargado de clausurar el acto, donde ha empezado destacando que “es muy importante organizar este tipo de jornadas”. “Hay que conseguir la igualdad y que la gente pueda expresarse por su valía y no por su género”, ha continuado explicando. Además, ha resaltado que “en estas jornadas no tenemos que equiparar al hombre y a la mujer, sino resaltar la valía de todas las mujeres, porque sois referentes y el futuro de las niñas depende mucho de vosotras”.

La primera mesa redonda de la jornada ha estado formada por seis deportistas y exdeportistas pioneras en sus disciplinas que representan el pasado, presente y futuro del deporte español y que están dejando un legado, no solo en el deporte, sino también en la sociedad. Lydia Valentín (halterofilia), Ruth Beitia (atletismo), Adriana Cerezo (taekwondo), Laura Ester (waterpolo), Laura Heredia (pentatlón moderno) y Laura Fuertes (boxeo) han hablado sobre las dificultades que atravesaron durante sus inicios, la falta de referentes y el progreso a nivel de igualdad que ha vivido el deporte en los últimos años.

Lydia Valentín ha recordado que sus inicios no fueron fáciles: “No había tantas chicas como ahora”. En este sentido, Adriana Cerezo ha reconocido que “he tenido un camino más allanado que otras deportistas”, aunque mantiene el objetivo de “seguir allanando el camino a las mujeres que vengan por detrás”.

Si los inicios fueron difíciles, en parte, era por la falta de referentes femeninas, algo que ha recordado Laura Ester: “Cuando empecé no había referentes femeninas. No se hablaba de ellas. Poco a poco se va hablando más de nosotras y vemos que las niñas pequeñas ya nos conocen”. Además, ha afirmado que “ es muy bonito que las niñas puedan tener desde pequeñas grandes referentes femeninas y que quieran practicar sus deportes”.

Laura Heredia es la primera mujer española que consigue la clasificación para unos Juegos Olímpicos, un éxito que, según ha confirmado, le ha hecho marcarse un claro objetivo: “Me estoy dando cuenta de que mi participación va a marcar un punto y aparte en el pentatlón moderno. Quiero dar más visibilidad y poder inspirar a niños y niñas a practicar mi deporte. Que vean que si yo he sido capaz, ellas también lo son”.

Siguiendo esta línea, Laura Fuertes ha celebrado que se haya cambiado la visión de que el boxeo sea un deporte masculino. “Ha habido mucha progresión y eso me alegra, porque cada vez hay más mujeres y más niñas”, ha comentado con emoción.

Por su parte, Ruth Beitia ha dejado un mensaje reivindicativo que contiene un claro deseo de cara al futuro: “Que no tengamos que hablar de jornadas de mujer y deporte, que hablemos de deportistas, independientemente del género. Que vivamos la plena igualdad en el deporte”.

Tras un breve descanso, se ha dado paso a la segunda mesa redonda, protagonizada por otras seis mujeres que estarán en los Juegos Olímpicos de París, aunque no como deportistas. Mujeres que ocupan puestos de gran responsabilidad y que, a pesar de no contar con tanta visibilidad, desempeñan funciones de vital importancia para llevar a cabo la actividad deportiva.

Esta segunda mesa ha estado compuesta por Alejandra Quereda, seleccionadora del equipo nacional de gimnasia rítmica, Elena Benítez, directora técnica de la Real Federación Española de Taekwondo, Mónica Solana, fisioterapeuta de la Real Federación Española de Natación, Vanesa Chichón, árbitro internacional de esgrima, Asunción Loriente, presidenta de la Federación Española de Remo y Manuela González, miembro de los servicios médicos de la delegación española en los Juegos Olímpicos.

Mónica Solana ha reivindicado el trabajo oculto de los servicios médicos y fisioterapia: “Los deportistas no podrían rendir al 100 % siempre o apretar las tuercas sin el trabajo de fisioterapia. Gracias a esto, pueden conseguir medallas y mínimas olímpicas”. Un comentario que ha reforzado Manuela González, explicando que, además, “mejorar la calidad de vida y deportiva de los atletas es nuestra motivación y nuestro fondo”.

Alejandra Quereda es la viva representación del sacrificio y la pasión por el deporte. “Después de Río 2016, tenía pensado apartar la gimnasia. Pero, llegado un momento, le di un vuelco radical a mi vida y me convertí en seleccionadora nacional. Lo que estaba en un segundo plano volvió a ser el centro y seguí poniendo las mismas ganas y esfuerzo para conseguir el objetivo: estar en París 2024”.

Al igual que las deportistas actuales, estas seis mujeres también se han tenido que enfrentar a grandes dificultades. Elena Benítez ha explicado que “cuando yo empecé a hacer deporte, tenías que aceptar ciertos estereotipos”. Posteriormente, ha comentado que “hicimos un trabajo y un camino para que ninguna niña se tenga que plantear si un deporte es adecuado para ella o no por ser mujer”.

Vanesa Chichón ha celebrado que la Federación Internacional de Esgrima “está apoyando mucho más a la mujer”, algo que “nos ayuda a desarrollarnos y demostrar todo lo que podemos hacer”.

Por su parte, Asunción Loriente ha dejado un claro mensaje que le ha servido para allanar su camino hacia la presidencia de la Federación Española de Remo: “No soy consciente de las dificultades extra que tengo por ser mujer, porque no pienso que tenga que tener un handicap por ello”.

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